Graves problemas en planta de manufactura de Xbox 360

Al menos 300 empleados de la planta Foxconn en Wuhan, China, amenazaron con arrojarse desde la azotea de uno de los edificios del conglomerado industrial el pasado 2 de enero, cuando la compañía se negó a cumplir con sus compromisos de pago.

De acuerdo con el portal Record China, la situación fue de tal gravedad, que el alcalde de Wuhan tuvo que intervenir para evitar lo que fácilmente pudo haberse convertido en una tragedia. Asimismo, se informa que, como consecuencia del altercado, la producción de consolas Xbox 360 fue suspendida momentáneamente. Cabe recordar que Foxconn es el fabricante más grande de componentes electrónicos a nivel mundial y atiende a 27 empresas, entre ellas Apple, Nokia, Panasonic, Nintendo y, por supuesto, Microsoft.

Según diversos reportes, Foxconn había prometido a los trabajadores una bonificación, misma que más tarde fue negada. Ante las quejas, los empleadores ofrecieron la alternativa de aceptar la situación o renunciar con una compensación. Buena parte optó por la segunda opción, sólo para descubrir que la compensación también había sido cancelada.

El enfado ante la mencionada arbitrariedad fue la que condujo a centenares de inconformes a reaccionar tan drásticamente, y la preocupación no estaba injustificada, pues en 2010 por lo menos una docena de obreros de Foxconn cumplió con las amenazas y se suicidó.

En respuesta, Microsoft emitió un comunicado donde subrayó que toma los problemas laborales muy seriamente y está conduciendo la investigación pertinente. “Microsoft está comprometido con el trato justo, la seguridad de los trabajadores contratados por nuestros proveedores y con el cumplimiento de nuestras políticas.”

Aunque seria, esta situación es sólo una de muchas otras que ya se han presentado y seguirán presentándose en China, país cuyo auge económico se ha logrado fundamentalmente a partir de mano de obra barata y desprovista de leyes que la protejan. En China los obreros no pueden formar sindicatos ni apelar al recurso de la huelga, lo que favorece la recurrencia de abusos y malas condiciones laborales.