Will Powers, uno de los agentes de relaciones públicas que fuera despedido la semana pasada como parte de un considerable recorte en las oficinas de SCEA en San Diego, despotricó ayer via Twitter contra la compañía, cuestionando sus prioridades y asegurando que todos los juegos que saldrán durante la época de Navidad fracasarán por falta de soporte.
Además, Powers criticó el hecho de que las diferentes ramas de Sony carezcan de autonomía pues, dijo, eso ocasiona que PlayStation sufra por asuntos relacionados al mercado de los televisores.
Tienes que preguntarte qué estaba pensando PlayStation cuando despidió a más de la mitad de su equipo de relaciones públicas de software de cara a la temporada navideña, señaló. Prácticamente están lanzando títulos a su muerte porque no tienen soporte de RP LBPK [sic.], Sports Champions 2, Wonderbook, agregó.
El exagente lamentó que un departamento ya de por sí escueto en cuanto a recursos ahora tenga que arreglárselas con menos empleados, y aunque reconoció que el área de relaciones públicas no genera dinero directamente, da muy buenos resultados con poco costo y es leal, lo que no puede decirse de las agencias externas.
Dicho lo anterior me pregunto cuáles son las prioridades de la compañía entera ¿de qué sirve ofrecer multiplayer ad hoc si nadie tiene un Vita? . Sony en general está sirviendo a demasiados amos. Cada rama debería operar de forma autónoma. PlayStation no debería sufrir porque los televisores se están encareciendo.
Todo esto lo digo porque genuinamente amo y me importan los productos PlayStation, pero su éxito está siendo boicoteado internamente, concluyó Will Powers.
El asunto es relevante porque si bien estas declaraciones están motivadas por enfado y frustración ante un despido, en ellas también hay puntos a considerar y a debatir. Por un lado, el exempleado quizá tenga razón al decir que los títulos a lanzarse próximamente podrían ver su soporte algo mermado dadas las condiciones del departamento de RP de SCEA, aunque en lo que concierne a la estrategia general de la compañía, ni Powers ni nosotros podríamos aventurar una crítica razonable sin el adecuado conocimiento de causa, que quizá sólo posean los ejecutivos de más alto rango en Sony, como tal vez Kaz Hirai. ¿Ustedes qué piensan de estas declaraciones?
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