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Lamentablemente, el mundo en la actualidad está viendo el regreso de grupos de ultraderecha, afines a las ideas del fascismo y el racismo, sobre todo en Europa, continente que ya fue lastimado por una de las guerras más cruentas y la más grande del Siglo XX. De ahí que se esté volviendo común conocer sobre escándalos que tienen lugar en la política, el deporte y el entretenimiento relacionados con esta situación. En este caso, tocó el turno del popular juego de estrategia en miniatura, que también existe en los videojuegos, Warhammer por un suceso en España.
El escándalo empañó una competencia de Warhammer 40,000
De acuerdo con información de The Gamer, al escena competitiva de Warhammer 40,000 en España se ha visto envuelta en la polémica luego de que un torneo se viera empañado por la presencia de un jugador cuyo equipo e indumentaria giran en torno al fascismo español y al nazismo. Esto ocurrió durante el evento GT Talavera, celebrado en la tienda Invasión Talavera ubicada en Toledo, España, donde se dieron cita los mejores jugadores de Warhammer 40,000 para enfrentarse sobre la mesa y lucir sus mejores estrategias de combate y defensa.
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Games Workshop dejó claro que no tolerará ese tipo de situaciones
Sin embargo, desde que inició el evento llamó la atención la presencia de un equipo de Warhammer 40,000 llamado "Pintor Austriaco", nombrado así en referencia al dictador alemán del partido Nazi. Lo peor, el jugador que los representó en el evento portaba una playera que lucía como escudo un símbolo que combinaba elementos de la Falange, movimiento y partido político español de corte fascista, con la cruz solar, símbolo racista. Asimismo, el jugador portaba un dieño con varias suásticas.
Cuando llegó el momento de jugar, el competidor que enfrentó el jugador del equipo "Pintor Austriaco" se negó a participar y el evento se vio empañado por ello. El escándalo fue tal que llegó a Games Workshop, compañía responsable de Warhammer, quien presentó un texto titulado El Imperio es guiado por el odio. Warhammer no.
En él, la compañía dejó claro que no tolerará ninguna manifestación o expresión relacionada con ideologías radicales y violentas, ni siquiera a manera de sátira o broma. Asimismo, fue tajante al señalar: "jugadores que portan símbolos de odio, no los dejaremos participar, no queremos su dinero y no los queremos en la comunidad de Warhammer".
Finalmente, Games Workshop cerró invitando a los organizadores independientes de eventos de Warhammer para que hagan lo mismo y no permitan la participación de equipos y jugadores afines a ese tipo de ideologías.
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