Lo ames o lo odies tienes que reconocer que Pokémon GO ha sido un éxito masivo. A años de su lanzamiento, el juego de Niantic sigue generando ganancias millonarias gracias a una enorme comunidad que día a día sale a cazar monstruos de bolsillo. Este enorme éxito no podía ser ignorado por Game Freak, compañía para la que fue necesario encontrar una manera de aprovecharlo en la saga principal.

El resultado de este esfuerzo fue Pokémon: Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee!. Aunque The Pokémon Company y Game Freak han hecho todo para dejar claro que una experiencia de corte tradicional llegará el próximo año, existen un montón de dudas sobre este proyecto, pues se eliminaron conceptos clave de la serie y su lugar lo ocuparon mecánicas basadas en las de Pokémon GO.

Después de tener la oportunidad de jugarlo, completar su historia principal y pasar parte del postgame tenemos una buena idea de lo que Game Freak intentó hacer con Let’s Go. Entonces, ¿es una entrega que vale la pena para los fans? ¿Los cambios hacen que el juego sufra? Preparamos una reseña para que lo sepas.

Un fresco regreso a Kanto

Pokémon Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! es una reimaginación de Pokémon Yellow, la última entrega de la primera generación de Pokémon. Esto significa que sigue una línea muy similar a la del juego de 1998, pero con algunos cambios. También quiere decir que las criaturas en estado salvaje que encontrarás sólo corresponden a las primeras 150 entradas del Pokédex. Como mencioné antes, el objetivo de este proyecto es atraer a los jugadores que se enamoraron de la saga con Pokémon GO. Esto significa que varios ajustes fueron requeridos para transformarlo en un juego que no desentone con la experiencia que ofrece el proyecto de Niantic. Algunos de ellos llegan como una bocanada de aire fresco y honestamente no puedo imaginar otra entrega de Pokémon sin ellos. Otros tienen el potencial de causar fricciones con las expectativas de los fans de hueso colorado.

"Algunos de [los cambios] llegan como una bocanada de aire fresco"

Comenzaré con los cambios positivos. El principal es que los enfrentamientos aleatorios desaparecieron. Cuando camines por el mundo encontrarás a distintos tipos de Pokémon viviendo en su ecosistema y para poder capturar a alguno primero que tendrás que tocarlo. Esto no sólo te permite ahorrar tiempo y hace que la exploración sea menos tediosa, sino que también logra que el mundo se sienta vivo. Es un sueño hecho realidad poder ver a todas estas criaturas moviéndose por el mundo.

Algo que no habíamos visto es a los Pokémon acompañantes y en Pokémon Let’s Go! tendrás 2: a tu criatura inicial y a cualquier otro Pokémon que elijas. Es algo extremadamente sencillo, pero hace maravillas para la inmersión. Me refiero a que en un montón de ocasiones tus acompañantes te ayudarán a encontrar objetos escondidos. Además, tu criatura inicial reacciona a los sucesos de la historia y a muchos elementos del mundo. Gracias a esto sientes que poco a poco se va formando un vínculo especial con tu Pikachu o Eevee.

Una de las principales fricciones que mencioné antes es que ahora no peleas contra los Pokémon salvajes. Esto trae algunos problemas, como que sólo enfrentarás batallas contra otros entrenadores. Esto hizo que sintiera me arrebataron la oportunidad de conocer a mis Pokémon. Me explicó: en entregas anteriores llevaba a mis criaturas de nivel 1 al 100 batalla por batalla. Gracias a esto entendía a fondo sus fortalezas, debilidades y podía diseñar estrategias más interesantes. Aquí, mi tiempo peleando fue menor y como consecuencia me quede sin conocer el potencial de todos mis compañeros. A fin de cuentas, no es un problema tan grande para alguien con experiencia en la saga, pero, ¿qué hay de esos nuevos jugadores a los que busca atraer esta entrega? Ahora bien, tampoco es como que todo sea malo ya que la ausencia de batallas aleatorias acelera el ritmo del juego.

Esto nos lleva al nuevo sistema de captura. En esta entrega, los Pokémon salvajes se capturan como en Pokémon GO. Es decir, simplemente tienes que lanzar la Pokébola en el momento correcto para aumentar las posibilidades de atrapar a la criatura. Cuando juegas en modo televisor, tienes que mover el Joy-Con para arrojar una Pokébola. Este esquema de control por movimiento es divertido, pero desafortunadamente no es tan preciso como debería. Por esto es probable que en muchas ocasiones mandes Pokébolas a direcciones equivocadas. Si juegas en modo portátil tendrás que mover la consola para apuntar y presionar A para lanzar la Pokébola. Una alternativa más sencilla y atractiva.

"[El sistema de progresión] se aleja de la fórmula clásica de Pokémon"

Al no haber batallas contra Pokémon salvajes también se tuvieron que hacer cambios importantes a la progresión de Pokémon Let’s Go!. En este juego todos los miembros de tu equipo recibirán experiencia cada vez que captures a un Pokémon. Ahora bien, si atrapas sin interrupciones a una misma especie Pokémon entonces crearás un combo que te otorgará más experiencia y aumentará tus posibilidades de encontrar a un espécimen más poderoso (con mejores IV) o que sea shiny. Todos los Pokémon que captures y no vayas a usar pueden ser enviados al Profesor Oak, quien te recompensará con caramelos que aumentarán considerablemente el poder de los Pokémon que los consuman. La manera en la que funciona me parece agridulce. Por un lado, lo veo como una buena implementación de los sistemas de Pokémon GO. Por el otro, considero que se aleja de la fórmula clásica de Pokémon, por lo que Let’s Go deja de sentirse como una entrega principal. Además, que los Pokémon sean desechables es algo que aún me cuesta procesar.

Otra de mis quejas con Pokémon Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! es que no está seguro del tipo de historia que quiere contar. A lo que me refiero es que sigue los mismos hechos que Pokémon Red, Blue y Yellow, sólo que en esta ocasión las vivimos en la piel de otros protagonistas. Esto significa que algunos personajes de los originales ―como Blue― ya aparecen como entrenadores experimentados. Para los novatos esto no representa ningún problema; sin embargo, para los veteranos parece ser una historia que se lleva a cabo tiempo después de Pokémon Yellow. Así pues, al jugarlo es probable que se pregunten por qué nadie recuerda la ubicación del escondite del equipo Rocket en Celadon o cuál es la razón por la que Silph Co no tiene mejores medidas de seguridad para evitar que Giovani vuelva a invadir sus instalaciones. Me parece que Game Freak debió hacer un mayor esfuerzo para que en la propia historia quedara claro que era una reinterpretación de los hechos del original.

"Pokémon Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! no está seguro del tipo de historia que quiere contar"

Mi última crítica es que Game Freak quitó contenido de la entrega original. Para ser más específico, aquí no es posible jugar en la Game Corner y la Safari Zone dejó de existir. Se cree que la razón por la que se retiraron los juegos fue para evitar alguna controversia relacionada con las apuestas. Dicho esto, las máquinas de este lugar ya se ven como arcades, así que ¿por qué no sustituir las apuestas por otro tipo de minijuegos? Por otro lado, la Safari Zone fue sustituida por el GO Park y la diferencia entre ambas instalaciones es abismal. Al final se siente como si le hubieran arrancado partes importantes a Kanto.

Captura Pokémon en donde sea

La relación de Pokémon: Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! con Pokémon GO no se limita a su sistema de captura. De hecho, el juego para Nintendo Switch te permite trasladar algunas de las criaturas que atrapaste en tu escuela o parque favorito por medio de Pokémon GO. Esta opción sirve bien, además de que es cómoda y fácil de usar.

El sistema funciona de la siguiente manera: cuando visites Fushia City encontrarás el GO Park. En estas instalaciones puedes trasladar tus criaturas de Pokémon GO a Pokémon Let’s Go! después de haber vinculado ambos juegos. Una vez que decidas cuáles son las criaturas que quieres trasladar, estas serán almacenadas en el parque. Ahí podrás decidir si quieres capturarlas o si prefieres que se queden almacenadas. Ten en cuenta que se trata de una pista de 1 solo sentido, así que no puedes pasar Pokémon de Let’s Go a GO.

Esta opción resulta imprescindible para los que busquen completar el Pokédex, ya que es la única manera de obtener a Meltan y a Melmetal. Con tu primera transferencia de cada semana obtendrás una caja misteriosa en Pokémon GO que, al abrirse, hará que un montón de Meltan aparezcan a tu alrededor. Además, Meltan sólo puede evolucionar a Melmetal en Pokémon GO y para hacerlo requieres 400 caramelos.

En general, la conectividad entre Pokémon GO y Pokémon Let’s Go! se siente simplona, en especial cuando consideramos que es uno de los puntos de venta principales del juego. Confieso que es emocionante poder entrenar a los Pokémon que capture en el mundo real; sin embargo, la sensación se desvanece rápido. Además, la falta de una opción que me permita regresar mis Pokémon al celular hace que prefiera conservar a los más poderosos en Pokémon GO.

Soy el campeón de la Liga Pokémon…¿y ahora qué?

Todo fan de Pokémon sabe que sus atractivos principales están en el postgame. Es decir, todas esas actividades en las que inviertes un montón de horas después de haber completado la historia principal, vencido a la Elite Four y haberte coronado campeón. En Pokémon Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! este tipo de contenido está presente y si bien hace muchas cosas bien, en otras se queda corto.

Sin profundizar mucho para evitar spoilers ―aunque el material promocional se me adelantó― lo más destacado del postgame es la oportunidad de enfrentar a entrenadores legendarios. Se trata de batallas muy emocionantes en las que vale la pena participar por un par de razones. La primera es porque son combates de alto nivel que realmente te costará mucho trabajo superar. La segunda se debe a que son muy significativos para quienes hayan crecido con la franquicia y jugado la primera generación en algún momento de su vida. Además, el juego también te permite volver a enfrentar a los líderes de gimnasio ―quienes tendrán un equipo más poderoso― y retar a la Elite Four en un sinfín de ocasiones. Gracias a esto siempre tendrás entrenadores con los cuales pelear.

"El reto que ofrecen [los Master Trainers] es mucho menos interesante de lo que creía"

La parte del postgame que te tomará más tiempo son los Master Trainers. Hay 153 de ellos y cada uno dedica su vida a entrenar a un solo tipo de Pokémon. Así pues, tu misión será ir con cada uno de ellos y derrotar a su amada criatura con una tuya de la misma especie. Antes de que debutara Let’s Go, los Master Trainers me parecían una idea interesante; sin embargo, mi opinión dio un vuelco de 180° cuando los vi en acción. Originalmente lo veía como un concepto noble que me iba a motivar a atrapar a cada uno de los Pokémon de Kanto, entrenarlos y conocerlos. Desafortunadamente, el reto que ofrecen es mucho menos interesante de lo que creía y me di cuenta que existen mejoras cosas en las que invertir mi tiempo que en grindear hasta tener un Metapod con el poder suficiente como para vencer a uno de su tipo, pero de nivel 65.

Otro tropiezo del postgame se encuentra en que las funciones online de Pokémon: Let’s Go son muy limitadas. Game Freak eliminó el emparejamiento que funcionaba bien en pasadas entregas e implementó un sistema de creación de partidas por código. Así pues, carece de una manera automática de enfrentarte a entrenadores de un nivel similar al tuyo. El robusto modelo de intercambios de las últimas entregas también fue sustituido por los códigos. De este modo, para obtener los Pokémon que te faltan sólo tienes 2 opciones: unirte a una comunidad de intercambio u organizarte con un amigo que tenga la otra versión.

Un nuevo look para una vieja aventura

Pokémon: Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! presentan cambios gráficos que logran que Kanto luzca completamente renovado. Ahora bien, en gran parte esto se debe a que la última vez que visitamos este lugar fue en Pokémon Heart Gold & Soul Silver (2009). De hecho, el salto en calidad gráfica deja de ser tan impresionante cuando lo comparamos con lo visto en entregas más recientes. Muchos de los modelos ―entre ellos los de los Pokémon― y las animaciones son las mismas que vimos en la sexta y séptima generación. Dicho esto, ahora todo luce en alta definición y con mejores efectos de iluminación. Cabe mencionar que el juego tiene una tasa de 30 fps y que sufre algunas caídas de cuadros en algunas zonas.

La banda sonora de Pokémon Yellow también fue renovada para esta entrega. Lo más destacado de este aspecto es que pese a los arreglos instrumentales, las canciones conservan esa esencia sencilla de sus versiones originales. Otro punto a favor del audio es que permanecen los sonidos originales de cada Pokémon, lo que resulta en una experiencia nostálgica.

En términos generales la presentación de Pokémon: Let’s Go! me deja satisfecho. Insisto en que no es nada del otro mundo. Incluso muchos sentirán que Game Freak nos quedó a deber en su debut en un hardware mucho más poderoso que el 3DS. No obstante, cumple con lo necesario para lucir bien y ser una bomba de nostalgia.

Un juego para fans o solo para nuevos jugadores?

"Encontré una experiencia agradable y nostálgica que me dejó disfrutar una de mis sagas favoritas de una manera fresca"

Aunque conserva todo lo que hace a Pokémon una franquicia especial, es imposible negar que Let’s Go, Pikachu! & Let’s Go, Eevee! tiene un sabor muy diferente al de entregas pasadas. Sí, las bases siguen ahí, pero los sistemas de crianza y captura pasaron por muchos cambios para satisfacer las expectativas de una audiencia muy diferente a la tradicional. Pese a eso encontré una experiencia agradable y nostálgica que me dejó disfrutar una de mis sagas favoritas de una manera fresca. En pocas palabras: lo considero como un rico tentempié que aliviará el hambre por la entrega de 2019.

Debo reconocer que en Let’s Go! no invertiré cerca de 100 horas como he hecho en entregas pasadas. Creo que lo mismo le pasará a quienes están clavados en los aspectos competitivos y de crianza. Dicho esto, sí me veo viviendo más aventuras por Kanto para completar el Pokédex original e incluso me emocionaría una reimaginación similar de Gold y Silver.

Por otro lado, lo recomiendo ampliamente a los fans de Pokémon GO y a quienes no han tocado una entrega de Pokémon desde la primera generación. Se trata de un viaje lleno de nostalgia que elimina todo el tedio de las entregas originales para así ser más cómodo y accesible que nunca. Ahora bien, como mencioné antes, las marcadas diferencias con las entregas anteriores hacen que sea difícil verlo como el mejor punto de entrada a la serie.