Konami nos ha traído una nueva franquicia de béisbol y decidió usar bobbleheads para representar a los personajes del juego, figuras tradicionales en Estados Unidos, que están asociadas comúnmente con jugadores de varios deportes, y normalmente tienen una cabeza desproporcionada en comparación con el cuerpo, que además es sostenida por un resorte; aquí no tienen piernas, lo que le da una apariencia cómica. Todo lo anterior podría llevarnos a creer que MLB Bobblehead Pros sería una aproximación más casual a este deporte, pero, ¿realmente será así?

[/p]

Me encantan los juegos de beisbol, pero el mayor problema es encontrar con quien jugarlos, ya que es difícil enseñar las mecánicas de juego a mis amigos que muestran poco o ningún interés por el Rey de los Deportes en la vida real, así que lo mismo sucede en la virtual. Por si eso fuera insuficiente, la mayoría de estos videojuegos son complicados para quienes no lo siguen como deporte, ya que además de necesitar entender los controles, es indispensable comprender las reglas; en verdad es algo compejo.

Por todo eso, cuando vi MLB Bobblehead Pros me pareció una gran oportunidad para jugar un título de beisbol; la presentación me hizo pensar que se trataba de una opción cómica y casual, pero una vez que lo jugué me di cuenta de que la experiencia tal vez está un poco lejos de esa idea.

Para hablar de algunos ejemplos, está el modo Exhibition, donde puedes jugar un partido acomodando las reglas a fin de que tenga la duración que te parezca adecuada, pero hay que ser sinceros, pocas personas tendrán la paciencia para jugar a nueve entradas, así que es probable que quieras bajar ese número. También puedes jugar una temporada completa con cualquier equipo de la MLB, puedes tener enfrentamientos contra otros jugadores en línea y también hay un modo cooperativo.

La presentación es simpática, los personajes pueden sacarte una sonrisa en las primeras impresiones y te darán ganas de compartir el juego con los pequeños de la familia; desgraciadamente, esta ternura se termina de golpe cuando el pitcher está por lanzar la bola al bateador. Así es, el sistema de juego de Bobblehead Pros está lejos de ser casual y cerca de ser un desastre.

Tengo que decir que no me queda claro si el juego realmente tenía la intención de ser algo fácil de controlar, el sistema de pitcheo es extraño. Cuando controlas al lanzador, frente a ti un cuadro que representa la zona de strike y tu pitcher tendrá algunas opciones para elegir el tipo de lanzamiento a ejecutar, después de seleccionarlo diriges un cursor por donde quieres que pase la bola, pero la verdad es que en raras ocasiones será exacto, ya que al parecer hay otros factores que influyen en la ejecución del movimiento, incluso tu lanzador comenzará a cansarse y si lo usas demasiado únicamente lograrás lastimarlo.

Al estar en esta posición te preguntarás el por qué los jugadores pueden conectar batazos fácilmente, pero esa duda se disipa cuando tomas el bat. Cuando te toca tomar el papel del lanzador te darás cuenta de que hacer contacto con la bola es muy fácil, sólo tienes que poner un cursor por donde veas que el pitcher colocará el lanzamiento y después apretar un botón. Esto es inconcebible, sobre todo para los que sabemos que batear está considerado como una de las acciones más difíciles en el mundo de los deportes.

Lo peor de todo es que lo malo no termina ahí, de hecho, cuando un bateador hace contacto con la bola comienza otra pesadilla para el jugador que está a la defensiva: los personajes se mueven bastante lento, la selección del jugador que controlas la mayoría de las veces es inadecuada y además es difícil tomar la bola cuando esta va rodando por el campo.

MLB Bobblehead Pros pudo ser una buena idea si su tipo de juego fuera casual; que la presentación no te engañe, este título es más serio de lo que puede creerse y eso está bien, el problema es que las mecánicas de juego son poco atractivas para el público dedicado de los títulos de deportes, por lo que queda como una experiencia regular, podríamos decir sin piernas, como sus personajes.