Hay una franquicia responsable de traer un estilo particular al mundo del videojuego, crear un género y divertir a millones. Su música es genial, el combate es muy rápido y tiene un protagonista que define la palabra "carisma". Nos referimos a Devil May Cry.

Dante, el protagonista, busca vengar la muerte de su madre y la mejor forma de hacerlo es eliminando demonios. El gameplay de la franquicia es frenético y extremo, al grado de haber sentado las bases para que juegos como God of War y Bayonetta llegaran al mercado.

Sin importar lo que haga, Dante derrama estilo por donde pasa; sus movimientos son sobrenaturales y sus reflejos, impresionantes, por lo que el combate se presta a la perfección para una presentación en HD. Era cosa de paciencia, pues tarde o temprano Capcom lanzaría esta versión.

Esta reedición se hizo de la manera más rápida y sencilla posible, utilizando todo el material gráfico de los juegos originales, así que las texturas no se trabajaron en HD, lo que significa que ahora los detalles se ven terribles y hasta viejos. Sin duda lo más triste en este aspecto son los menús y la mayoría de los cinemas que muestran su edad y lucen mal a 1080 sin tratamiento alguno.

La primera impresión que tendrás será tan mala, que incluso te hará dudar si hiciste una buena compra, la calidad del video del intro del primer DMC es baja y lleva a pensar que todo el juego será así. Sin embargo, a la hora de jugar esta nueva verás que presenta detalles impresionantes como mejoras en la luz, texturas que ya no están fuera de foco, gran detalle en los personajes y un ritmo que permanece constante sin importar la cantidad de enemigos que haya en pantalla.

Gracias a que la velocidad se conserva a lo largo del juego, los ataques de Dante siempre lucen increíble. El sistema de combate ha envejecido muy bien y sigue siendo completamente válido, aunque hay otros elementos que ya se sienten viejos, por ejemplo los movimientos y la cámara fija, que son cosa del pasado y generalmente funcionaban de esa manera por una limitación de hardware de aquel entonces.

Devil May Cry 1 es un gran juego y la piedra angular sobre la que se construyó el género en sí. La diversión está conformada por un gran personaje con buenas armas, y aunque gráficamente es el más débil de todos los títulos de la serie, históricamente es el más importante.

La segunda parte es una gran decepción, una versión diluida del primer juego, poblada de enemigos muy malos, con un diseño falto de inspiración y armas sin carisma; en fin, es un título sin alma que se incluye en esta edición sólo por completarla. Es fácil comenzar a hablar de él y terminar al punto de la exageración. En esumen, es una propuesta mediocre que se ve cool a pesar de no serlo.

La joya de la corona es Devil May Cry 3, una precuela que narra la historia de un Dante más joven, por supuesto, con un sistema de combate flexible y fluido. Por sí solo hace que valga la pena todo el paquete y al jugarlo descubrirás cuánto ha influido sobre un gran número de títulos de los últimos tres años.

La decisión de comprar Devil May Cry HD Collection es sencilla, si no has jugado ningún título de la serie, debes adquirirlo, es difícil darse cuenta de lo emocionante y entretenido que es hasta que juegas los originales; por otro lado, si ya los tienes para PS2 no tiene mucho sentido hacer el gasto, pues las mejoras son pocas.

Esta colección no es perfecta y mucho menos un clásico obligado, tiene espantosos errores de cámara y definitivamente Capcom pudo haber hecho un mejor trabajo al pasar esta colección a HD. A su favor incluye dos juegos muy buenos y al menos para usuarios exclusivos de Xbox 360, es una gran opción para conocer la saga como es debido.